Aquel que tiene un porqué para vivir se puede enfrentar a todos los "cómos". Friedrich Nietzsche

domingo, 24 de enero de 2010

Impresiones, sensaciones...

En El Cairo no hay coches en la calle, hay coches, carros, motos, cosas con ruedas y algo a lo que podríamos llamar coche pero que con el paso del tiempo la historia tendrá que poner una diferencia entre los "coches" del pasado y los coches de ahora. En El Cairo no van en moto 2 personas, van 3, y si apuran ponen al niño encima del transportín de espaldas para entrar la familia completa (visto con mis propios ojos chicos). En El Cairo no hay porquería en la calle, directamente la calle y la porquería, o mierda, se fusionan en una misma cosa. En El Cairo no hay SMOG, yo creo que el SMOG es algo menor, que te da la voz de alarma y hay que parar el tráfico (vease Milán), aquí directamente los niveles de contaminación que soportan son bestiales, y lo sé porque no necesito una pantallita en medio de la plaza que me alerte de la contaminación sino porque lo veo con mis propios ojos, se respira, se toca...; en El Cairo esto no es un problema, eso es así y punto. En El Cairo no cierran los comercios, ni las peluquerías, ni los bares, ni nada, aquí la vida es "intensiva" 24 horas. En El Cairo no hay que buscar un taxi, los taxistas te atosigan nada más pisar la calle; en El Cairo no hay aceras transitables, hay aceras más exigentes que andar por el monte y directamente vas por el asfalto; en El Cairo no te planteas coger un taxi porque el autobus es más barato, en El Cairo el taxi es lo más barato. En El Cairo los autobuses no paran para que subas, o lo pillas al vuelo o te quedas en tierra (ya contaré esto porque es muy grande). En El Cairo no te guardas el papel hasta que veas una papelera, aquí no hay papeleras; en El Cairo no hay perros, hay gatos, por todos sitios, y por lo tanto dudo que haya ratas, aunque una vi, supongo que ya habrá sido cazada. En El Cairo no vas a la farmacia ni al súper ni a comer, te lo traen todo a casa las 24 horas del día; en El Cairo no hay mendigos, porque los mendigos no tienen casa y aquí hay Cairotas que directamente tienen a la calle por casa. En El Cairo no hace falta llevar las luces del coche encendidas, puedes ahorrar; en El Cairo no tocas el claxon para avisar, sino que mantienes conversaciones con el claxon para todo. En el Cairo no hay contaminación, sino que la contaminación es ambiental, acústica y física. En El Cairo no se trabaja los viernes, se trabaja con el carrusel deportivo; en El Cairo no hay inseguridad ciudadana, eso lo tenemos en occidente, porque inseguro te sientes una noche en Madrid, Barcelona o Sevilla, aquí no, esto es seguro, en El Cairo no hay ladrones. En El Cairo no hay que buscar policía porque ha pasado algo y no la encuentras, en El Cairo directamente está siempre ahí, a tu lado, en todas las esquinas, pero no pasa nada, absolutamente nada. En El Cairo los coches no hacen caso a los guardias de tráfico, hacen lo que les apetece, y en El Cairo chicos,ESO ES ASÍ, los policías pasan más tiempo mandando mensajes al móvil sentados en la acera que controlando algo, porque el tréfico es incontrolable y pasar nunca pasa nada, ya lo he dicho, seguro, muy seguro.

Pero sobre todo, en El Cairo no corres riesgo de tener un accidente, sabes que antes o después, hagas lo que hagas, el taxista lo tendrá....


Lo mejor: ir a todos lados en taxi por menos de un euro
Lo peor: discutir con el taxista, pelearte, alguna vez se va a liar..

No hay comentarios:

Publicar un comentario